Chema Mansilla
Editor - Cine y TVEn un momento en el que el género de la ciencia ficción vive una nueva edad dorada en televisión, con ejemplos como Silo, Fundación se ha mantenido como una rara avis: visualmente deslumbrante, narrativamente compleja y filosóficamente provocadora. La serie, basada libremente en la saga de novelas de Isaac Asimov, ha ido construyendo una mitología galáctica en la que ciencia, religión, política y emociones humanas colisionan en una sinfonía narrativa que, como el propio Imperio que retrata, desafía el paso del tiempo.
Desde su estreno en 2021, esta producción original de Apple TV+ creada por David S. Goyer y Josh Friedman ha apostado por una adaptación valiente, que toma los huesos de la obra de Asimov y les da nueva carne, con personajes redimensionados y tramas entrelazadas y un apabullante aspecto visual. No es una traslación literal, sino una reinvención respetuosa que actualiza los temas del autor para una audiencia moderna.
El tráiler de la tercera temporada promete un cierre épico
El nuevo tráiler de la tercera temporada de Fundación, que se estrenará el próximo 11 de julio en Apple TV+, es toda una promesa de espectáculo para los seguidores más fieles de la serie. Y no es para menos: tras los eventos de la segunda temporada, la serie apunta a una conclusión cargada de tensión dramática y épica galáctica. El Imperio Cleónico está fracturado, la Fundación se enfrenta al verdadero caos, y el destino de la humanidad parece pender de un hilo cada vez más fino.
Lejos de ofrecer simplemente espectáculo visual, aunque lo tiene, y a raudales, Fundación entra en su recta final como una de las series más densas, filosóficas y desafiantes del panorama actual. Y eso es exactamente lo que la hace tan especial.
Lo que hace única a Fundación: creencias, ciencia y el libre albedrío
Uno de los grandes temas de esta segunda temporada ha sido el uso de la creencia como herramienta de poder. La Iglesia de Seldon, que comenzó como un culto menor, se ha convertido en un actor político de primer orden. Los seguidores de Hari Seldon ya no solo predican su palabra: organizan, manipulan, luchan. La religión ya no es sólo fe; es control. Y Fundación no tiene reparos en mostrar cómo esa fe puede usarse como arma.
Este tratamiento de la religión como estructura de poder resuena en un tiempo en el que el pensamiento crítico y la información científica se ven constantemente desafiados por narrativas emocionales y manipuladas. Es una serie que, sin levantar la voz, nos pregunta: ¿en qué creemos realmente y por qué?
Por otro lado, está el eterno dilema de la psicohistoria, la famosa ciencia-ficción matemática de Asimov que permite predecir el comportamiento de masas. Esta mecánica narrativa se vuelve cada vez más interesante cuando se enfrenta a su mayor amenaza: el factor humano. El amor, la traición, los errores, e incluso los dones sobrenaturales del enigmático Mulo, desmontan toda ecuación. Porque sí, en esta temporada ha quedado claro que la emoción desestabiliza hasta la fórmula más perfecta.
Clones, decadencia y el peso del poder
El otro gran eje temático de la serie es el Imperio Cleónico, sostenido por clones sucesivos de un mismo emperador: Hermano Día, Hermano Atardecer y Hermano Amancer. Esta idea, que podría parecer simplemente un giro visual, es en realidad una demoledora crítica a la falta de renovación en el poder. A lo largo de la segunda temporada hemos visto cómo estos "tres rostros de una misma moneda" se fracturan por dentro: Día se vuelve paranoico, Amanecer busca libertad, Atardecer está cansado de todo y de todos. El imperio no solo cae por fuerzas externas, sino por su incapacidad de evolucionar.
La metáfora es poderosa y clara: cuando una estructura de poder se reproduce sin cuestionarse, sin adaptarse, está condenada a la autodestrucción. Y si todo lo anterior no fuese suficiente, el final de la segunda temporada dejó caer la bomba que anticipa el caos total: el Mulo. Este misterioso personaje, con habilidades mentales que rozan lo divino, escapa a cualquier predicción. La psicohistoria no lo puede explicar, Seldon no lo vio venir, y Gaal Dornick apenas comienza a comprenderlo. Su presencia representa un cambio radical en las reglas del juego. ¿Qué ocurre cuando surge alguien que no solo rompe el tablero, sino que se inventa uno nuevo? Ese será el gran dilema que marcará la tercera y última temporada.
El momento perfecto para redescubrir Fundación
Puede que hayas pensado que Fundación era una serie lenta, difícil o demasiado filosófica. Y puede que en parte tengas razón. Pero si amas la ciencia ficción que va más allá de los fuegos artificiales y se atreve a hablarte de lo que mueve a la humanidad, entonces esta serie es exactamente lo que estabas buscando.
La tercera temporada se estrena el 11 de julio en Apple TV+, y es la oportunidad perfecta para descubrir, o redescubrir, una de las ficciones más ricas, ambiciosas e injustamente ignoradas de la actualidad.
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